El Extremely Large Telescope, en construcción en el desierto de Atacama, en Chile, cambiará la astronomía. Con el espejo más grande jamás instalado en un observatorio, será posible identificar señales de vida encontradas en exoplanetas con solo una noche de observación.
El nuevo telescopio gigante de Chile podría cambiar todo lo que sabemos sobre el universo. Llamado Extremely Large Telescope (ELT), está previsto que comience a funcionar en 2028.
Y en su primera noche, podría detectar señales de vida en planetas alrededor de estrellas cercanas, según nuevas simulaciones.
El ELT se está construyendo en el norte de Chile y tendrá una estructura impresionante. Su espejo primario tendrá un diámetro específico de 39 metros.
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Esto significa que el telescopio gigante de Chile podrá capturar mucha más luz que cualquier otro telescopio terrestre jamás construido. Las imágenes serán 16 veces más nítidas que las del famoso telescopio espacial Hubble.
Esta ganancia en capacidad de observación es esencial para los científicos. Con él será posible obtener detalles que antes eran imposibles de ver. Según un estudio reciente, los primeros resultados podrían llegar rápidamente, quizás poco después de que comiencen las operaciones.
Un telescopio puede analizar atmósferas de exoplanetas sin foco
Una de las herramientas más importantes del telescopio gigante de Chile será el análisis de las atmósferas de planetas fuera de nuestro sistema solar, los llamados exoplanetas. Esto se hace observando cuándo un planeta pasa por delante de su estrella, desde nuestro punto de vista.
La luz de la estrella pasa a través de la atmósfera del planeta antes de llegar a nosotros. Al estudiar esta luz, los científicos pueden identificar moléculas como agua, dióxido de carbono y oxígeno.
O Telescopio espacial James Webb (JWST) ya hace este tipo de análisis. Obtuvo datos de varias atmósferas de exoplanetas. Sin embargo, los resultados no siempre son claros. Un ejemplo son los planetas b y c del sistema TRAPPIST-1.
El JWST no pudo detectar con precisión si tienen atmósfera. Los datos sugieren que quizá no tengan aire, pero eso todavía no es lo suficientemente preciso.
Una mayor sensibilidad ELT puede resolver este tipo de dudas. Con él será posible observar atmósferas muy tenues, que el JWST no puede detectar. Esto puede conducir a descubrimientos importantes.
Más allá de los tránsitos planetarios: luz reflejada
Y hay más. La ELT no depende únicamente de los tránsitos planetarios, es decir, cuando el planeta pasa por delante de la estrella. También podrá estudiar planetas que no realizan este movimiento, utilizando la luz reflejada por la estrella. Esto aumenta significativamente el número de exoplanetas que se pueden estudiar.
Para probar el potencial del telescopio, los investigadores realizaron simulaciones con varios tipos de planetas. Eligieron mundos que orbitan estrellas cercanas. Estos planetas son los más comunes y es probable que se estudien en el futuro.
Un telescopio podría encontrar vida extraterrestre en 10 horas
Se han observado cuatro tipos de planetas similares a la Tierra: uno con abundante agua y vegetación, otro con vida primitiva, otro con océanos evaporados como Marte o Venus, y otro sin vida pero con potencial para tenerla. También se simularon planetas del tamaño de Neptuno, que tienen atmósferas más gruesas.
La idea era ver si el ELT podía diferenciar entre cada tipo de planeta. Y lo más importante: evitar errores. En otras palabras, no confundamos un planeta sin vida con uno que la tiene, y viceversa.
Los resultados fueron positivos. Según el estudio, el ELT podrá hacer distinciones claras, al menos para las estrellas cercanas.
En el caso de la estrella más cercana a la Tierra, Próxima Centauri, diez horas de observación serían suficientes para detectar vida en un planeta similar a la Tierra. Para planetas del tamaño de Neptuno, una hora sería suficiente para capturar datos suficientes.
Con esto, el Telescopio Gigante de Chile podría ayudar a responder una de las grandes preguntas de la humanidad: ¿estamos solos en el universo? Y la respuesta podría llegar en unos pocos años.
Con información de Live Science.