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Descubra el riesgo climático de extraer hidrógeno bajo tierra. ¿Puede este combustible sostenible acelerar el calentamiento global?
El calentamiento global es una amenaza constante que, gracias a la búsqueda de nuevos combustibles como el hidrógeno y fuentes de energía sin precedentes, estamos empezando a sobrellevar la situación, aunque la rapidez con la que avancemos es otra cuestión.
El mundo se encuentra en una situación complicada en lo que respecta a los combustibles. La contaminación ha creado situaciones difíciles de asimilar para el planeta. En este contexto, se acaba de descubrir una reserva de energía para milenios (como lees). Sin embargo, abrirlo podría acelerar el cambio climático en lugar de enriquecer nuestra combinación energética con una fuente limpia y sostenible. Por qué decimos esto? No sólo importa lo que busquemos, sino también cómo accedemos a él y, sobre todo, cómo lo extraemos.
Tenemos un combustible que duraría siglos: se oye hablar de él todos los días, el hidrógeno
El combustible del que hablamos es uno del que se oye hablar todos los días, especialmente en el campo de la automatización: el hidrógeno. Se han encontrado suficientes reservas de hidrógeno para alimentar a toda la civilización durante siglos.
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Un informe del Servicio Geológico de Estados Unidos sostiene que hay suficiente hidrógeno natural atrapado bajo tierra para satisfacer la demanda durante cientos de años. Geoffrey Ellis, del Servicio Geológico de Estados Unidos, dijo en una reunión de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia, celebrada recientemente en Denver, que hay hasta 5,5 billones de toneladas de H en depósitos subterráneos en todo el mundo.
El hidrógeno es un elemento que está en la lista de las grandes promesas para combatir la crisis energética y ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. En este contexto, hace unos meses salió a la luz que la mina de cromita de Bulqizë, en Albania, es capaz de producir más de 200 toneladas de hidrógeno al año.
La explotación del hidrógeno que se encuentra de forma natural (hidrógeno geológico o dorado) puede representar la forma más limpia y económica de obtenerlo.
El calentamiento global sigue siendo una amenaza
Ellis dedicó mucho tiempo a realizar un estudio que aún no se ha publicado. En él os contará los detalles de los sorprendentes resultados que ahora ha vislumbrado, aunque indica que puede que no sea fácil acceder a este gas. "Es probable que la mayor parte del hidrógeno sea inaccesible", comentó al Financial Times.
"Pero un pequeño porcentaje de recuperación aún cubriría toda la demanda prevista (500 millones de toneladas por año) durante cientos de años", declaró. Según él, los depósitos de hidrógeno son excepcionales y pueden haberse generado por el contacto de determinados materiales ricos en hierro con aguas subterráneas. Sin embargo, en algunos casos, es posible que H no esté en su forma más pura.
En estos casos puede ir acompañado de otros gases, como el metano, y hay que separarlos. Su extracción libera metano a la atmósfera, que es la parte “oscura” de la noticia. Es importante recordar que el metano es un gas de efecto invernadero que es 85 veces más potente que el dióxido de carbono en un ciclo de dos décadas.
Pese a estos datos, el científico sostiene que tiene un gran potencial para ser más ecológico que el propio hidrógeno verde.
El problema: extraerlo de forma inadecuada podría acelerar el cambio climático
De hecho, nadie ignora que este reservorio de hidrógeno se encuentra en las entrañas de la Tierra. ¿Qué podemos hacer para acceder a él? Exploraciones anteriores de yacimientos similares se llevaron a cabo de dos maneras muy diferentes:
- Con enormes perforadoras que acaban generando emisiones contaminantes a la atmósfera.
- Con maquinaria pesada, pero propulsada por combustibles renovables (hidrógeno o eléctrico).
En cuanto a la planta de procesamiento, de la que tal vez recuerdes que ya hemos hablado antes, la única solución sostenible es que funcione con energía renovable. Sólo así estaríamos hablando de hidrógeno verde, azul u dorado, y no fucsia o marrón, que no son nada adecuados.
Por eso, aunque este combustible pueda tener una reserva abundante, la posible aceleración del calentamiento global desanima a algunos expertos.
