Las aerolíneas alientan a los pasajeros a compensar las emisiones generadas por sus vuelos ofreciendo programas para que los viajeros paguen más.
Gol, Tam y United ya ofrecen esta opción de pago en el sitio web de la empresa. Según Gol, el compensación por contaminación de los vuelos de junio de 2021 a diciembre de 2022 fue de 13.100 toneladas de CO2, a través de pagos realizados por clientes y otras acciones. El esfuerzo equivale a preservar 1,8 millones de árboles.
El cálculo de estos valores se basa en modelos matemáticos que permiten estimar con precisión cuánto contaminante se genera por vuelo, teniendo en cuenta el consumo en cada etapa del viaje. Para ello, también se consideran los precios variables del mercado de bonos de carbono: normalmente, compensar una tonelada de CO2 cuesta entre US$ 10 y US$ 20 (aproximadamente R$ 52 y R$ 104).
Air France-KLM permite a los pasajeros pagar Compensación por contaminación de vuelo desde 2021; En Gol, se lanzó una función en el sitio web para que los clientes puedan pagar una compensación al comprar un boleto.
- DESPIDO MASIVO: ¡En medio de la crisis, Airbus Group anuncia el despido de más de 2.000 empleados!
- Río de Janeiro podría conseguir un metro monumental que conecte la capital con Niterói después de 60 años de espera, pero con una condición: albergar los Juegos Panamericanos
- El estado brasileño pierde todas sus conexiones ferroviarias con otras regiones de Brasil y ahora necesita 4 MIL MILLONES para reconectarse en todo el país
- Explosión de innovación: São Paulo implementa revoluciona el transporte en el sector petrolero en Mossoró Oil & Gas Energy
La industria de la aviación se enfrenta al reto de reducir sus emisiones de dióxido de carbono. En 2019, antes de la pandemia, se emitieron en Brasil 17,4 mil toneladas de CO2 (1,25% del total del país). En 2021, con menos vuelos operando, ese número se redujo a 10,9 (0,71%).
Para aliviar la situación, 115 países firmaron el acuerdo Corsia (Scheme for Reducing the Carbon Footprint in International Aviation), que prevé medidas obligatorias a partir de 2027. Entre las principales estrategias se encuentran el desarrollo de nuevas tecnologías para aeronaves, mejora del tráfico aéreo y operaciones aeroportuarias, uso de combustibles menos contaminantes y compensaciones de carbono.
Algunas aerolíneas ya ofrecen la opción de que los pasajeros donen dinero para aumentar la compra de combustible SAF (combustible de aviación sostenible), pero que aún es escaso en el mercado. Si bien es una solución bienvenida para las aerolíneas que buscan pagar las deudas generadas por el cierre de la pandemia y recuperar el volumen de viajes previo a la pandemia, algunos cuestionan si esta responsabilidad no debería ser de ellos.