Una empresa británica convierte residuos plásticos en hidrógeno y pretende producir 35 toneladas diarias para energía limpia.
Powerhouse Energy Group, con sede en el Reino Unido, ha anunciado el inicio de las operaciones de su Unidad de Prueba de Materia Prima (FTU), un sistema diseñado para convertir residuos plásticos en hidrógeno. La tecnología es parte de un enfoque innovador para el uso de residuos sólidos.
La unidad, ubicada en el Centro Tecnológico de la compañía en Bridgend, Gales, se presentó recientemente a un grupo de 50 inversores durante un evento privado.
El proyecto es una representación a menor escala de la tecnología de Generación Modular Distribuida (DMG) desarrollada por Powerhouse.
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Paul Emmitt, CEO de Powerhouse Energy Group, destacó que la compañía está estudiando los desafíos de la pirólisis y la gasificación de residuos. Según él, FTU es el resultado de una extensa investigación y desarrollo, buscando mejorar la eficiencia y viabilidad de la conversión de residuos plásticos en combustibles limpios.
"Powerhouse es consciente de los problemas que han afectado el uso de la pirólisis y la gasificación de residuos y, por lo tanto, hasta la fecha hemos centrado nuestros esfuerzos en la investigación y el desarrollo, que culminaron en esta FTU.“, dijo Pablo.
Simulación de procesos en un entorno controlado
La FTU tiene capacidad para procesar 2,5 toneladas de residuos plásticos al día. Aunque se trata de una escala reducida, la estructura permite simular los principales procesos de una gran unidad comercial, que debería alcanzar en el futuro una capacidad de 35 toneladas diarias.
El funcionamiento de la unidad ha sido probado continuamente. Los informes indican que la tecnología ha demostrado resultados positivos en pruebas prolongadas. Sin embargo, como se trata de un proyecto experimental, no se espera un funcionamiento continuo y completo durante la fase de pruebas.
El sistema también permite la optimización de parámetros para futuras unidades comerciales. Con esto, Powerhouse busca mejorar la eficiencia de los procesos y lograr que su tecnología pueda implementarse a mayor escala.
Conversión de residuos plásticos
FTU proporciona una plataforma para probar diferentes tipos de residuos plásticos y evaluar su viabilidad para la conversión en hidrógeno. El proceso ocurre mediante pirólisis, una descomposición termoquímica que ocurre en ausencia de oxígeno.
Este método descompone los plásticos en sus componentes químicos originales. El producto principal de este proceso es el gas de síntesis, una mezcla rica en hidrógeno, metano y monóxido de carbono.
El sistema Powerhouse fue desarrollado con el objetivo de maximizar la proporción de hidrógeno en el gas de síntesis. Este elemento se considera uno de los combustibles más prometedores para la transición energética, ya que puede utilizarse como fuente de energía limpia.
Purificación y utilización del gas de síntesis
Antes de ser utilizado, el gas de síntesis pasa por un proceso de purificación, eliminando compuestos ácidos e impurezas no deseadas. El resultado es una corriente de gas limpia, lista para una variedad de aplicaciones.
Este gas puede utilizarse para generar electricidad, mediante turbinas de gas, o bien procesarse para obtener hidrógeno puro. La versatilidad de este producto permite adaptar la tecnología a las diferentes demandas del mercado energético.
Conversión de residuos plásticos: ajustes y personalización
El sistema también permite realizar ajustes para optimizar el rendimiento de la conversión de residuos plásticos. La introducción de vapor u oxígeno en el proceso permite la gasificación, una alternativa para el tratamiento de residuos plásticos.
Con esta flexibilidad, Powerhouse puede probar diferentes tipos de residuos y adaptar su tecnología según las necesidades del mercado. La capacidad de ajuste también es un factor importante para la viabilidad comercial de futuras unidades de gran escala.
Pruebas con diferentes materias primas
La empresa ya ha realizado pruebas con diferentes muestras de residuos plásticos. Los resultados indican que la tecnología funciona más eficientemente con plásticos que no pueden reciclarse mediante otros métodos convencionales.
El informe de Powerhouse confirma que FTU ha demostrado compatibilidad con una amplia gama de materiales. Este factor aumenta el potencial de la tecnología para resolver el problema de los plásticos difíciles de reciclar.
Expansión de la investigación sobre el hidrógeno
La búsqueda de métodos eficientes para producir hidrógeno a partir de residuos ha sido objeto de varios estudios. Recientemente, científicos de la Universidad Tecnológica de Nanyang en Singapur lograron convertir los lodos de depuradora en hidrógeno verde.
La iniciativa de Powerhouse Energy Group se suma a estos esfuerzos globales, explorando alternativas sostenibles para la producción de energía limpia.
Con información de Interesting Engineering.