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En una decisión que promete transformar la vida de muchos brasileños, la Comisión de Derechos Humanos (CDH) aprobó, el día 30, el Proyecto de Ley (PL) 3.965/2021, que permite a personas de bajos ingresos obtener una licencia de conducir financiada con recursos de multas de tráfico. Este avance podría suponer un punto de inflexión para los ciudadanos con menor poder adquisitivo, que ahora podrán obtener el documento sin comprometer más el presupuesto familiar.
Del diputado José Guimarães (PT-CE), la innovadora propuesta redirige fondos recaudados por multas de tránsito para pagar licencias de conducir de personas inscritas en el Registro Único de Programas Sociales (CadÚnico). La idea es que, además de promover la inclusión social, esta medida ofrezca a muchas familias la oportunidad de mejorar su movilidad y, en consecuencia, sus condiciones de vida y de trabajo.
Enmienda exige examen toxicológico a conductores profesionales que obtengan licencia de conducir a través del programa
El relator del proyecto, el Senador Dr. Hiran, opinó favorablemente la iniciativa, pero con una enmienda que impone pruebas toxicológicas periódicas a los conductores profesionales de las categorías A y B, propuesta del senador Eduardo Girão (Novo-CE). Esta modificación tiene como objetivo reforzar la seguridad del tráfico, especialmente en el caso de los conductores profesionales, que tendrían que demostrar que están libres de sustancias prohibidas para obtener o renovar su licencia de conducir (CNH). El examen deberá realizarse cada dos años y medio y se prepararán clínicas médicas para recolectar el material necesario, asegurando una infraestructura adecuada para las pruebas.
Según el relator, la exigencia de pruebas toxicológicas representa un avance importante para el tráfico brasileño. “Es una forma de aumentar la seguridad y garantizar que los conductores puedan conducir sin riesgos adicionales para la sociedad”, explicó el senador Dr. Hiran.
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Las multas de tráfico adquieren un nuevo propósito
Actualmente, los importes recaudados por las multas de tráfico se destinan a actuaciones como señalización, inspección y renovación de flota, además de campañas de educación vial. Con el nuevo proyecto, parte de estos recursos se redireccionarán para cubrir el costo de licencias de conducir para personas de bajos ingresos, aliviando la carga financiera de estas familias.
Este cambio busca dar respuesta a una realidad en la que, como destacó el Dr. Hiran, tener una licencia de conducir se ha convertido en un verdadero “privilegio”. En sus palabras, destacó que, para muchas personas de bajos ingresos, es imposible equilibrar el gasto en licencias, salud, alimentación y vivienda.
Próximos pasos: Comisión de Constitución y Justicia (CCJ)
La propuesta de licencia de conducir (CNH), aprobada por la CDH, aún debe ser revisada por la Comisión de Constitución y Justicia (CCJ) antes de ser votada en el pleno del Senado. La comisión está presidida por el senador Paulo Paim (PT-RS) y está compuesta por 19 miembros titulares y suplentes, que deliberarán sobre la constitucionalidad y legalidad del proyecto.
Si la medida avanza, el nueva política puede representar no sólo una mejora de las condiciones de movilidad y trabajo para brasileños de bajos ingresos, pero también un ejemplo de cómo dirigir recursos provenientes de multas de tránsito puede contribuir a una sociedad más justa e inclusiva.
