La reapertura de la mina de antimonio en Idaho promete abastecer el 35% de la demanda estadounidense, generar 550 puestos de trabajo y desafiar el control de China sobre minerales esenciales para tecnologías avanzadas como baterías, semiconductores y energías renovables.
Estados Unidos reabrirá una mina de antimonio en Idaho que estuvo cerrada durante más de 30 años. Este movimiento estratégico no se trata sólo de economía o recursos naturales; es una respuesta directa al control abrumador de China sobre minerales críticos y su importancia en el panorama tecnológico y militar global. Pero, ¿qué hace que el antimonio sea tan especial y por qué es tan importante esta decisión?
¿Qué es el antimonio y por qué es tan importante?
El antimonio es un metal raro con propiedades que lo hacen esencial en varias industrias. Se utiliza en la fabricación de semiconductores, baterías e incluso municiones. Pero su verdadero valor va más allá: es fundamental para las tecnologías avanzadas como las energías renovables y la electrónica de alto rendimiento.
Actualmente, China domina el mercado mundial de antimonio y produce alrededor del 48% del suministro mundial. Esto le da al país un inmenso poder en sectores estratégicos. Con el reciente recorte de China en las exportaciones de minerales críticos, Estados Unidos se ha dado cuenta de la urgencia de asegurar su propio suministro.
La mina de antimonio en Idaho: un proyecto estratégico
La mina de Idaho tiene una larga historia. Durante la Segunda Guerra Mundial, fue esencial para suministrar antimonio y oro para los esfuerzos bélicos. Desde su cierre en 1996, el país ha optado por importar estos minerales, ignorando sus propios recursos naturales.
Ahora, la empresa Perpetua, con el apoyo del multimillonario John Paulson, está volviendo a poner en funcionamiento esta mina. Se espera que la reapertura genere más de 550 empleos locales y una inversión de mil millones de dólares. Además, se estima que la mina podrá abastecer el 1% de las necesidades anuales de antimonio de Estados Unidos, fortaleciendo significativamente la economía local y nacional.
El choque entre EE.UU. y China por el control de minerales críticos
Los minerales se han convertido en la nueva frontera de rivalidad entre las dos mayores potencias económicas del mundo. Cuando Estados Unidos impuso sanciones a las empresas chinas en 2024, China respondió restringiendo la exportación de elementos cruciales, incluidos el antimonio, el galio y el germanio.
Esta “guerra de los minerales” Es mucho más que una disputa comercial. Es una lucha por el control de sectores clave como los semiconductores, los coches eléctricos y las energías renovables. Reabrir la mina de Idaho es una manera de que Estados Unidos demuestre que está dispuesto a reducir su dependencia de China y fortalecerse internamente.
Preocupaciones ambientales y desafíos locales
A pesar de los beneficios económicos, la reapertura de la mina también generó polémica. Las tribus indígenas como los Nez Perce han expresado su preocupación por los posibles impactos en el medio ambiente, especialmente en la población de salmón de la región.
El Servicio Forestal de EE. UU. publicó un informe de 154 páginas detallando las medidas para mitigar los impactos ambientales. Aún así, los grupos ambientalistas argumentan que los riesgos pueden ser mayores que los beneficios.