La ciudad pretende comenzar a utilizar lava volcánica en la construcción. Un material natural y resistente puede ser una alternativa sostenible y económica para las obras de construcción. Vea cómo funciona la aplicación
Un arquitecto en Islandia propone una nueva forma de construir edificios y estructuras: utilizando lava volcánica como materia prima. Arnhildur Pálmadóttir dirige el proyecto “Lavaforming”, que transforma el poder destructivo de la lava en algo útil para la construcción. La idea es simple pero audaz: guiar la lava aún fundida a través de canales hasta que se enfríe y forme estructuras sólidas.
El proyecto está siendo desarrollado por el estudio de arquitectura s.ap, con sede en Reykjavík, la capital de Islandia. La región es conocida por su intensa Actividad volcánica, ya que está situada entre las placas tectónicas euroasiática y norteamericana.
Esta geografía única hace de Islandia el lugar ideal para explorar nuevas ideas relacionadas con la lava, uno de los materiales más abundantes y desafiantes que existen.
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Cómo funciona el “Lavaforming”
La propuesta de Pálmadóttir va más allá de una solución creativa. Quiere cambiar la forma en la que la arquitectura se relaciona con el medio ambiente. En lugar de seguir explotando intensivamente los recursos naturales, como ocurre con la minería tradicional y la quema de combustibles fósiles, “Lavaforming” busca aprovechar los recursos naturales que ya están disponibles y activos.
La lava, cuando aún está en estado líquido, puede alcanzar temperaturas entre 700 y 1.200 grados centígrados. El plan es guiar este material a través de canales previamente planificados, lo que le permitirá enfriarse hasta adquirir formas controladas y resistentes. A partir de esto sería posible crear desde cimientos para casas hasta bases para ciudades enteras.
A pesar del potencial, el proyecto enfrenta desafíos técnicos importantes. Uno de los principales es conseguir que la lava se solidifique de manera uniforme. Cuando el enfriamiento se produce de manera irregular la estructura puede volverse inestable.
Estandarizar las formas es un paso fundamental para transformar esta propuesta en algo seguro y viable en la construcción cotidiana.
La lava como material del futuro
Si se superan estos obstáculos, la lava podría representar una alternativa sostenible a materiales tradicionales como el hormigón y el ladrillo. Esto puede reducir la dependencia de recursos no renovables y ayudar a combatir los impactos ambientales causados por la construcción actual.
Islandia ya utiliza eficientemente la energía geotérmica, otra fuerza natural presente en el país. El uso de lava en la construcción puede ampliar aún más este modelo de uso sostenible.
El proyecto muestra cómo la naturaleza, incluso en su forma más agresiva, puede incorporarse de forma inteligente y creativa al desarrollo humano.
La propuesta se presentará en la Bienal Internacional de Arquitectura de Venecia. Allí, Pálmadóttir quiere demostrar que la lava puede desempeñar un papel en el futuro de la arquitectura, tal como lo hizo la energía del vapor en el pasado.
La exposición pretende inspirar nuevas ideas sobre el uso de materiales naturales y el camino hacia la construcción sostenible. Islandia puede convertirse en un ejemplo mundial si convierte la amenaza de los volcanes en una verdadera oportunidad de innovación.
Con información de Correio Braziliense.