Amado por muchos y odiado por tantos, el poderoso Trump regresa a la Casa Blanca con la política de 'Estados Unidos primero': ¿quién gana y quién pierde? Ucrania, la OTAN, Israel y China: aliados y rivales globales.
El regreso de Donald Trump al escenario político mundial en 2024 promete sacudir las estructuras de las relaciones internacionales y redefinir la postura de Estados Unidos hacia aliados y rivales. Con tu póliza “Estados Unidos primeroVolviendo al foco de atención, el impacto de sus decisiones se extiende desde el ejército estadounidense hasta países como Ucrania, la OTAN, Israel y China, generando tanto expectativas de estabilidad como temores de nuevas tensiones globales.
Pero ¿quién gana y quién pierde realmente con este nuevo enfoque estadounidense hacia Donald Trump? Comprender cómo este cambio de dirección puede remodelar el equilibrio de poder en el siglo XXI y afectar profundamente el escenario geopolítico.
Impactos del regreso de Trump: ganancias y pérdidas para Ucrania, la OTAN, Israel, China y el ejército estadounidense
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca señala una transformación tanto a nivel nacional como internacional. Su estilo pragmático y directo sugiere una política centrada en fortalecer el ejército estadounidense y priorizar los intereses estadounidenses, a menudo por encima de las alianzas multilaterales, lo que provoca entusiasmo en algunos sectores y preocupación en otros.
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Durante su primer mandato, Donald Trump priorizó un enfoque externo basado en el concepto “Estados Unidos primero”, sin tener en cuenta alianzas que consideraba onerosas. Ahora, la expectativa es que el país reduzca su participación directa en los conflictos, alentando a otras naciones a asumir más responsabilidad por su propia defensa.
La OTAN, por ejemplo, debería experimentar una revisión del papel de Estados Unidos en la alianza, y Trump alentaría a Europa a invertir más en defensa. Este movimiento, que apunta a reducir la dependencia europea del apoyo militar estadounidense, podría fortalecer las alianzas regionales. Sin embargo, también genera preocupación de que la salida gradual del ejército estadounidense deje un espacio que potencias como Rusia y China intentarían llenar.
Ucrania y el peso económico del conflicto para el 'bolsillo' estadounidense
Desde el inicio de la guerra en Ucrania, Estados Unidos, bajo la dirección de Biden, se ha convertido en uno de los principales valedores del país europeo. Con Donald Trump en el poder, es probable que se produzca un cambio: aboga por una solución negociada, con el objetivo de reducir los costos financieros y económicos de la guerra, incluido el impacto en los precios mundiales de la energía.
Esta postura podría ser desfavorable para el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, quien depende del apoyo occidental y de la asistencia militar estadounidense para contener a Rusia. Por otro lado, el presidente ruso Vladimir Putin puede ver ventajas en una postura estadounidense menos intervencionista y más negociadora, ya que esto favorece sus intereses expansionistas.
Oriente Medio: Apoyo a Israel y presión sobre Irán, Donald Trump debe retomar su política de “disuasión por la fuerza”
Donald Trump es conocido por su firme apoyo a Israel y cree que la seguridad del país es esencial para la estabilidad regional. En este sentido, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, puede considerarse beneficiado de la nueva política estadounidense, que promete continuar con un importante apoyo militar y financiero.
Respecto a Irán, Trump debe retomar su política de “disuasión por la fuerza”. Desde que abandonó el acuerdo nuclear en 2018, ha intensificado las sanciones económicas contra Irán para frenar su programa nuclear. Trump ve un Irán nuclear como una amenaza directa a Israel y sus aliados del Golfo, y estaría dispuesto a apoyar acciones preventivas para evitar que el país adquiera armas nucleares.
Beijing en alerta: Trump ve a China como el mayor rival económico de EE.UU.
Trump considera a China como el mayor rival económico de Estados Unidos, y ya ha señalado la posibilidad de aumentar los aranceles sobre los productos chinos, buscando proteger la economía estadounidense y reducir el déficit comercial. Para él, estos aranceles no son sólo una medida de negociación, sino también una forma de fortalecer la producción nacional y reducir la dependencia estadounidense de los productos chinos.
Respecto a Taiwán, Trump aboga por que el país asuma una mayor parte de los costes de su defensa, pero también promete apoyar su seguridad, considerando la importancia estratégica de la isla para contener la influencia china en el Pacífico.
Acuerdos de Abraham: un camino hacia la paz en Oriente Medio
Un aspecto importante de la política de Trump es el deseo de ampliar los Acuerdos de Abraham, que normalizaron las relaciones entre Israel y algunos países árabes. Estos acuerdos, vistos como un camino hacia la paz en Oriente Medio, deben ampliarse, abarcando a más países árabes y promoviendo una lucha conjunta contra el terrorismo.
La nueva posición de Estados Unidos en el escenario internacional
El regreso de Trump representa un enfoque transaccional centrado en los intereses directos de Estados Unidos, que promete dividir opiniones a nivel mundial. Israel y Rusia pueden ver ventajas en este pragmatismo, mientras que Ucrania e Irán pueden enfrentar desafíos mayores.
Esta nueva política tiende a tener un impacto significativo en las relaciones internacionales y la geopolítica en las próximas décadas, definiendo una nueva postura estadounidense en el escenario global.