El etanol ya es uno de los principales biocombustibles nacionales, pero ahora puede abaratarse
La producción de etanol de segunda generación es una de las áreas más prometedoras de la industria de los biocombustibles. Con la creciente demanda de fuentes de energía renovables y sostenibles, la producción de etanol de segunda generación tiene el potencial de impulsar la economía. Así, generará nuevos puestos de trabajo. Un descubrimiento reciente puede ayudar a incrementar y abaratar la producción de este biocombustible.
El descubrimiento fue realizado por investigadores de la Universidad de São Paulo (USP). En ese sentido, lograron crear un procedimiento sin precedentes que cambiará la forma de producir etanol. ¿Quiere saber más? sigue leyendo
¿Quiere saber más sobre la importancia de la calidad del etanol? Compruébalo todo en el siguiente vídeo.
Descubrimiento de nuevas enzimas por investigadores de la USP
Científicos de la Universidad de São Paulo (USP) descubrieron nuevas enzimas capaces de degradar la lignina, uno de los principales obstáculos para la producción de etanol de segunda generación. Esta sustancia, presente en las paredes celulares de las plantas, es la encargada de dar rigidez y resistencia a las células. Sin embargo, su presencia dificulta la extracción del azúcar necesario para producir etanol.
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Con las nuevas enzimas descubiertas por el equipo de la USP, será posible descomponer la lignina de manera más eficiente. De esta forma, esto permitirá una mayor extracción de azúcar y, en consecuencia, una producción más eficiente de etanol de segunda generación. Sin embargo, esto aumenta el deseo de la sociedad y de las empresas de contar con una fuente de energía renovable.
El potencial económico y de empleo que generará este nuevo método es muy interesante
La producción de etanol de segunda generación tiene un enorme potencial económico y de empleo. Además de ser una fuente de energía renovable y sostenible, el etanol de segunda generación puede ayudar a reducir la dependencia de los combustibles fósiles y contribuir a mitigar el cambio climático.
Con el descubrimiento de nuevas enzimas, la producción de etanol de segunda generación puede volverse aún más eficiente y económica. De esta manera, puede impulsar la industria de los biocombustibles y generar nuevos puestos de trabajo en todo el mundo.
beneficios ambientales
Además de los beneficios económicos y laborales, la producción de etanol de segunda generación también tiene importantes beneficios ambientales. Sin embargo, a diferencia de los combustibles fósiles, el etanol de segunda generación es una fuente de energía limpia y renovable que no contribuye al calentamiento global.
Con el descubrimiento de nuevas enzimas, será posible incrementar y abaratar la producción de etanol de segunda generación, haciendo aún más accesible y eficiente esta fuente de energía. Esto puede ayudar a reducir la dependencia de los combustibles fósiles y contribuir a construir un futuro más sostenible y justo para todos.
Escenario actual de producción de etanol en Brasil
Brasil es uno de los mayores productores y exportadores de etanol del mundo, con una producción anual de alrededor de 30 mil millones de litros. La producción de etanol en Brasil se realiza principalmente a partir de la caña de azúcar, que es una fuente de azúcar fácilmente fermentable.
La producción de etanol a partir de caña de azúcar Implica varios pasos, que incluyen la cosecha, el transporte, la molienda, la fermentación, la destilación y la deshidratación. La caña de azúcar se cosecha manualmente o con la ayuda de máquinas y se transporta a las plantas de procesamiento.
En el ingenio se muele la caña de azúcar para extraer el jugo. Este jugo contiene azúcar transformado en alcohol a través de la fermentación con la ayuda de la levadura. Luego, el alcohol se elimina por destilación para aumentar la concentración de etanol. Finalmente, se deshidrata para alcanzar el nivel de pureza requerido para ser utilizado como biocombustible.
La producción de etanol en Brasil es de gran importancia económica y social, ya que genera millones de puestos de trabajo en todo el país. Además, el etanol producido a partir de la caña de azúcar es una fuente de energía renovable y limpia, lo que ayuda a reducir la dependencia de los combustibles fósiles. De esta manera, contribuye a la mitigación del cambio climático.