Tecnología innovadora protege contra la corrosión y aumenta la eficiencia energética en Brasil

A medida que Brasil emerge en el escenario mundial como líder en energía solar, la búsqueda de métodos efectivos para extender la vida útil de los equipos de las plantas se ha convertido en una prioridad. La galvanización en frío aparece como una solución de vanguardia, ofreciendo protección contra la corrosión, fundamental para mantener una alta productividad en las instalaciones solares. Según el Ministerio de Minas y Energía, el país ya cuenta con más de 18 mil plantas solares, que en conjunto producen 10,3 gigavatios anuales, lo que pone de relieve el inmenso potencial de esta fuente renovable.

La batalla contra la corrosión

Marcos Pacheco, químico de Quimatic, fabricante de productos químicos especializados, señala que el galvanizado en frío no sólo protege las estructuras metálicas de las plantas fotovoltaicas contra la corrosión, sino que también se integra con el metal creando una barrera insuperable contra la oxidación. Esta tecnología destaca frente a los métodos convencionales, como pintar o utilizar lonas, porque ofrece una protección fiable y más duradera.

Eficiencia y practicidad

Los equipos de las plantas solares, frecuentemente expuestos a condiciones adversas, reciben galvanización en caliente en fábrica. Sin embargo, el mantenimiento y las intervenciones, como cortes y soldaduras, pueden comprometer esta protección inicial. El galvanizado en frío, aplicado simplemente con brocha o pistola, es una solución práctica para refuerzos o reparaciones, eliminando la necesidad de desmontar o transportar piezas.

El espíritu pionero y la innovación de Quimatic

Quimatic, pionera en la introducción del galvanizado en frío en Brasil en los años 90, ofrece dos soluciones principales: CRZ, de color gris oscuro, y GALVALUM, con acabado aluminizado. Ambas opciones forman una capa de zinc que no solo evita que el metal entre en contacto directo con agentes corrosivos, sino que también proporciona protección catódica, donde el zinc se sacrifica antes que el metal base. Esta estrategia asegura la integridad del metal, incluso en casos de daño a la capa de zinc.

Protección probada y asequible

Con zinc de 99,9% de pureza, las soluciones de Quimatic cumplen con las rigurosas normas ASTM A 780 y ABNT 6323. En pruebas de resistencia a la corrosión, estos productos demostraron una efectividad superior a las 1.200 horas en cámaras de niebla salina, equivalente a más de cinco años de protección en condiciones extremas. “La galvanización en frío permite a las plantas de energía solar en Brasil aumentar significativamente la vida útil de sus equipos, manteniendo el ritmo de crecimiento acelerado del sector”, afirma Pacheco.

Quimatic también ofrece un completo curso online sobre galvanizado en frío, aportando los conocimientos y habilidades necesarios para aplicar esta tecnología de forma eficaz. Esta innovación representa un hito en el mantenimiento y la sostenibilidad de las plantas solares, asegurando que Brasil permanezca a la vanguardia de la producción de energía limpia y renovable.

Fuente: Edson Barros – Diálogo Assessoria de Imprensa.