La noticia la ha hecho pública EDP, que junto a Engie y Repsol financian el proyecto WindFloat Atlantic
Proyecto pionero en Portugal, el parque eólico marino entra en funcionamiento. Ubicado frente a la costa del norte de Portugal, el parque produce energía que es transportada a tierra por un cable submarino. El proyecto denominado Windfloat Atlantic tiene capacidad para abastecer a 60 viviendas en un año.
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El proyecto WindFloat Atlantic está financiado por empresas energéticas europeas como EDP Renováveis, Engie y Repsol y utiliza la plataforma flotante desarrollada por Principle Power. Se conectarán tres turbinas con una capacidad combinada de 25 megavatios, lo que ayudará a aumentar la viabilidad económica de los parques eólicos flotantes en el mercado cada vez más competitivo de las energías renovables.
Las turbinas flotantes pueden tener una ventaja sobre las plataformas costa afuera tradicionales debido a una instalación más rápida. Las turbinas en Portugal flotan a 100 metros sobre el lecho marino, una profundidad aproximadamente dos tercios mayor que la profundidad máxima posible para las granjas marinas fijas.
Windfloat Atlantic ahora está en pleno funcionamiento y proporciona energía limpia a la red eléctrica de Portugal.
Según EDP, “Tras conectar con éxito la última de las tres plataformas al cable eléctrico que recorre los 20 kilómetros que separan el parque eólico de la central instalada en Viana do Castelo, la construcción del parque está finalizada”, según la eléctrica compañía.
EDP destaca que se trata del “primer parque eólico flotante semisumergible del mundo y generará energía suficiente para abastecer al equivalente a 60.000 usuarios al año, ahorrando casi 1,1 millones de toneladas de CO2”.