MENU
Menú
Início Las centrales hidroeléctricas generan y almacenan energía de manera más eficiente, limpia, económica y segura, siendo las más renovables entre todas las renovables

Las centrales hidroeléctricas generan y almacenan energía de manera más eficiente, limpia, económica y segura, siendo las más renovables entre todas las renovables

10 noviembre 2021 a 13: 20
Participación
Comparte en WhatsApp
Comparte en Facebook
Compartir en LinkedIn
Compartir en Telegram
Compartir en Twitter
Compartir por correo electrónico
Síguenos en Google Noticias
centrales - hidroeléctrica - solar - eólica - gas térmica - renovable - energía
hidroeléctrica más grande del mundo / Google Image

Las centrales hidroeléctricas tienen una “huella de carbono” menor que las centrales eólicas, solares y térmicas de gas, además de ofrecer el coste global más bajo del sector eléctrico.

A Ley 14.182 / 2021, que trata de la privatización de Eletrobras, estableció la contratación obligatoria de energía de usinas hidroeléctricas en las subastas A-5 y A-6, con la necesidad de contratar el 50% de la demanda declarada por las distribuidoras, hasta alcanzar los 2 mil MW en el período de 2021 a 2026, con entrega de energía a partir de 2026. Sin embargo, la subasta A-5, realizada el 30 de septiembre de este año, dejó fuera del proceso de licitación a las Pequeñas Centrales Hidroeléctricas (PCH).

Lea también

El Congreso Nacional idealizó la participación de las PCH en las subastas con el objetivo de corregir: (i) los problemas ocasionados al sector eléctrico y al consumidor por la bajísima contratación de centrales hidroeléctricas en los últimos 20 años, en especial de PCH y CGH que, de 2005 a 2018, fue menos del 2% del total; y (ii) el daño causado al sector de PCHs y CGHs por la falta de isonomía con otras fuentes renovables y con fuentes fósiles, lo que generó desventajas artificiales frente a PCHs y CGHs.

La medida funciona como una especie de puente hasta que se corrijan los principales problemas que enfrenta el sector.

Para Paulo Arbex, presidente de la Asociación Brasileña de PCH y CGH (ABRAPCH), esta medida funciona como una especie de puente hasta que se corrijan los principales problemas que enfrenta el sector: (i) tributación de su cadena productiva hasta un 38% superior a la de otras fuentes de energía renovable, (ii) requisitos de compensación ambiental a un costo 30% superior al de sus competidores, (iii) exenciones y condonaciones de impuestos de más de R$ 98 mil millones/año para los combustibles fósiles, (iv) ausencia de remuneración por servicios auxiliares prestados por PCH y CGH, (v) prorrateo de costos de red desproporcionados al uso, (vi) uso de embalses hidroeléctricos MRE para resolver problemas de terceros (a menudo sus competidores), para los cuales no fueron diseñados y que no no preocuparlos.

Las centrales hidroeléctricas ofrecen la forma más eficiente de generar electricidad, la forma más limpia, barata y segura de almacenar energía en forma de agua en sus embalses, son las más renovables entre todas las renovables (según el IPCC de la ONU), tienen la menor “huella de carbono” del sector eléctrico (1/3 de la eólica, 1/12 de la solar y 1/115 de la térmica de gas), y ofrecer el coste global más bajo del sector eléctrico.

La construcción de este tipo de centrales demora alrededor de un año y medio para entrar en operación, mientras que las centrales térmicas pueden demorar hasta 5 años en las subastas A-3, A-5. Arbex cree que la ventaja competitiva del país para evitar una crisis hídrica es construir más embalses para escalar satisfactoriamente el almacenamiento de agua durante la temporada de lluvias.

Países más desarrollados como Alemania y Noruega priorizaron las centrales hidroeléctricas antes de recurrir a alternativas más caras.

Por eso, los países más desarrollados han priorizado las hidroeléctricas antes que recurrir a alternativas más caras, menos eficientes o más contaminantes.

“En Alemania, un país con una superficie equivalente a la mitad del estado de Minas Gerais y donde el partido verde es más fuerte, las centrales hidroeléctricas tienen el estatus de prioridad estratégica nacional. Mientras que Alemania, con 7.200 represas hidroeléctricas, sigue intentando viabilizar otras con el apoyo del Partido Verde. Brasil, con solo 1.500, se debate si ya tiene demasiadas hidroeléctricas. Se vuelve surrealista”, comenta Arbex.

“Noruega, el 3º exportador de gas del mundo y el 12º de petróleo, genera el 94% de su electricidad a través de centrales hidroeléctricas y nunca ha tenido ningún problema de suministro o racionamiento de electricidad. ¿La diferencia? Noruega tomó la decisión de abastecer su mercado interno con energía limpia, barata, segura y confiable proveniente de centrales hidroeléctricas y, a diferencia de Brasil, incentivó la fuente, en lugar de penalizarla. Exporta su petróleo y gas y abastece a su población con hidroelectricidad. Brasil debería hacer lo mismo. Exportar petróleo y gas del presal en lugar de quemarlo para generar electricidad y abastecer el mercado interno con una combinación de fuentes renovables: hidroeléctrica, biomasa, eólica y solar. Brasil necesita maximizar su riqueza, monetizando tanto la riqueza de su potencial hidráulico como sus reservas de petróleo, en lugar de permitir que una riqueza canibalice a la otra”, concluye Arbex.

Relacionados
Más Reciente
COMPARTIR