Varias entidades del sector de la automoción ya han afirmado que la gasolina sintética es más limpia frente a los derivados del petróleo. Sin embargo, estudios de expertos recientes han encontrado que el combustible sintético contamina al igual que la gasolina normal.

Presentados como otra solución para los vehículos eléctricos, los combustibles sintéticos pueden no ser tan sostenibles como se anuncia. Esta es la conclusión de unas pruebas realizadas por la publicación europea Transporte y medio ambiente (T&E). Según el análisis, las nuevas pruebas de emisiones mostraron que los vehículos que funcionan con gasolina sintética emiten básicamente la misma cantidad de NOx que los modelos que utilizan combustibles derivados del petróleo. En resumen, la gasolina sintética es similar a la gasolina regular y al diésel en términos químicos y ha sido promocionada por la industria automotriz y proveedora de combustibles fósiles como una forma de prolongar el uso de automóviles de combustión en medio de la transición energética.

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El uso de gasolina sintética no tendrá mayores efectos en la reducción de contaminantes

Sin embargo, transformar energías limpias en combustibles que no usan petróleo es un proceso en el que hay mucha pérdida de eficiencia, además el costo de producción es muy alto y, ahora, se ha descubierto que a pesar de todo el proceso, la gasolina sintética es no tan limpio como parece.

La conclusión del T&E es que el uso de gasolina libre de petróleo en los vehículos no reducirá significativamente los gases que causan problemas de calidad del aire en las ciudades. Se compararon en pruebas de laboratorio las emisiones de un automóvil que utiliza gasolina derivada del petróleo y tres mezclas diferentes de gasolina sintética.

Prácticamente, un modelo que funciona con sintético emite altos niveles de NOx tóxicos en la misma proporción que los automóviles con motores de gasolina regulares. Además, si se tiene en cuenta la gasolina estándar E10 de la Unión Europea, la sintética libera 3 veces más amoníaco y monóxido de carbono, según la organización de investigación IFP Energies Nouvelles.

La producción de gasolina sintética es menos eficiente energéticamente que los coches eléctricos

Según el análisis, las propuestas del sector de la automoción para abrir espacio e insertar los combustibles sintéticos en los objetivos de emisiones de CO2 de los coches vendidos en Europa provocarán un aumento de los costes finales para los conductores.

Por tanto, conducir un modelo que no utilice gasolina común, sino sintética, costará 10 mil euros más que un coche eléctrico similar en un plazo de cinco años.

Finalmente, la fabricación de combustibles que no utilizan petróleo tiene una eficiencia muy inferior a la energía de los coches eléctricos. Alcanzar un umbral del 10% vendiendo autos nuevos con gasolina sintética en lugar de electrificarlos requerirá un 23% más de electricidad de fuentes limpias, según un estudio independiente de T&E.

Los coches eléctricos son la mejor opción para la sostenibilidad

Los combustibles libres de petróleo perdieron la carrera hacia la movilidad sostenible, pero nunca estuvieron cerca. Los vehículos eléctricos a batería ofrecen a los conductores la solución más limpia, asequible y eficiente para descarbonizar, mientras que los sintéticos son más adecuados para los aviones, donde la electrificación aún no es una opción.

Mientras marcas como Mercedes-Benz ya han anunciado que este tipo de combustible no forma parte de sus planes de reducción de emisiones, automotrices como Porsche, si bien apuestan por los vehículos eléctricos, han invertido en la producción de sintéticos.