La industria argentina busca eficiencia de Brasil para diversificar la producción del ingenio e impulsar la economía local.
A industria La empresa azucarera de Argentina busca inspirarse en el modelo brasileño para convertirse en una de las principales economías del país. La atención se centra en diversificar la producción en el sector energético, especialmente en la caña de azúcar. Recientemente, la central estaba esperando el anuncio de una nueva variedad de caña de azúcar transgénica, que se desarrolla desde hace unos diez años. Esta nueva variedad de caña de azúcar se puede cultivar en regiones que enfrentan escasez de precipitaciones.
Expansión y oportunidades para la industria de la caña de azúcar
El presidente de la Companhia Açucareira Los Balcanes, Jorge Rocchia Ferro, destacó que la nueva variedad de caña es resistente al glifosato y a la sequía.
También mencionó que se firmaron acuerdos con Brasil para desarrollar caña de azúcar que resista las heladas y la plaga Diatraea.
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Ferro cree que la implementación de esta tecnología podría incrementar significativamente la superficie agrícola, previendo una inversión de alrededor de 2 millones de dólares en Tucumán, donde se ubica la planta.
La estrategia de industria de la caña de azúcar en Argentina pasa también por ampliar la diversificación de los usos de la caña, reduciendo la dependencia del consumo de alimentos.
Esta dependencia podría ejercer presión sobre los precios del azúcar. Uno de los focos de esta estrategia es aumentar la producción de bioetanol, un biocombustible que se mezcla con gasolina.
Si bien el bioetanol está presente en el mercado argentino desde hace muchos años, la última década ha estado marcada por la inestabilidad debido a los frecuentes cambios en las regulaciones que afectan a la industria.
Los productores de caña de azúcar enfrentan desafíos con precios que no cubren los costos mínimos de producción.
Actualmente los productores de caña reciben alrededor de 657 pesos por litro, cantidad por debajo de lo necesario, que debería estar por encima de los 900 pesos.
El sector cañero clama por un aumento de precio a al menos 720 pesos el litro. Este número se considera viable con el Proyecto de Ley de Biocombustibles que se discute en el Congreso.
Nuevas reglas y expectativas para el sector
La nueva legislación propuesta reduciría la influencia del Departamento de Energía en la fijación de precios, permitiendo que estos precios se determinen mediante licitaciones entre los participantes en la cadena de producción de caña de azúcar.
Además, la ley aumentaría progresivamente el porcentaje de mezcla de bioetanol y abriría espacios para la entrada de nuevas empresas, como las petroleras.
El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, expresó la necesidad de reglas claras que promuevan una competencia justa y equilibrada en la industria.
A industria La azucarera argentina, además de centrarse en la producción de azúcar para el mercado interno y de exportación, también invierte en el aprovechamiento de residuos de caña para generar energía renovable.
Recientemente se inauguró el cuarto proyecto de cogeneración de energía eléctrica a partir del bagazo de caña de azúcar.
Después de extraer el jugo, la fibra seca se procesa y se utiliza para generar vapor que impulsa turbogeneradores, lo que genera alrededor de 20 MW de energía eléctrica.
Esta energía generada alcanza para abastecer la planta industrial y el excedente se inyecta al sistema interconectado nacional.