Con un control global del 90% de la refinación de tierras raras, China restringe las exportaciones de metales esenciales como el galio y el germanio, amenazando la producción de semiconductores y fortaleciendo su posición en la guerra comercial contra Estados Unidos.
China se lo muestra al mundo utilizando las tierras raras como arma real en la disputa comercial con Estados Unidos. Pero, ¿qué son estas tierras raras y por qué son tan importantes? Entendámoslo.
¿Qué son las tierras raras y por qué son importantes?
Las tierras raras son un grupo de 17 elementos químicos que se utilizan prácticamente en todo. implica alta tecnología. Desde teléfonos inteligentes hasta turbinas eólicas y, por supuesto, semiconductores, esos chips que hacen que los dispositivos funcionen. A pesar del nombre, no son tan raros, pero el proceso de extracción y refinación es caro y complicado, lo que hace que su mercado esté muy concentrado.
China controla el 60% de la extracción y un asombroso 90% de la refinación mundial de tierras raras. Esto no sucedió por casualidad. Desde la década de 1980, el país ha invertido fuertemente en el sector, mientras otras naciones veían la actividad como algo “sucio” y costoso. Así, China obtuvo un monopolio y, con él, el poder de dictar las reglas del juego.
- Brasil, ¿el país de los trenes? Plan ferroviario del Gobierno prevé hasta R$ 100 MIL MILLONES en inversiones para ferrocarriles
- ¡La población exige a Nikolas Ferreira como presidente de Brasil después de la polémica por monitorear Pix y hacer retroceder al gobierno y al IRS!
- BNDES inyecta R$ 480 millones a la Companhia Mineira de Açúcar e Álcool e impulsa la producción de etanol y bioenergía en Brasil
- Tras ganar 175 millones de dólares por la venta de PayPal en 1998, Elon Musk regresa al mercado financiero con X Money
Estrategia de China: cómo las tierras raras se convirtieron en un arma comercial
Cuando Estados Unidos impuso restricciones al acceso chino a los semiconductores, la respuesta no se hizo esperar: China cortó la exportación de tierras raras como el galio, el germanio y el antimonio. Estos metales son fundamentales en la producción de chips, lo que convierte la medida en un golpe directo al sector tecnológico occidental.
La prohibición puso al mundo en alerta. Sin acceso a estos materiales, la producción de tecnologías avanzadas se ve comprometida. Es como quitarle combustible a un coche durante una carrera. Al restringir los suministros, China ha demostrado cómo el control de la cadena de suministro puede ser un arma estratégica en tiempos de guerra comercial.
Asociaciones con Taiwán, Japón y otros países
Estados Unidos no se quedó quieto. Junto con Taiwán, Japón, Corea del Sur y Países Bajos, el país busca fortalecer su producción de semiconductores. Sin embargo, incluso con la tecnología disponible, todavía necesitan tierras raras para fabricar los chips, y ahí radica el problema.
Bajo la administración Trump, ha habido iniciativas para reactivar minas y refinerías en Estados Unidos. Con Biden, el enfoque continuó, pero los desafíos son enormes. Además de los elevados costes, las preocupaciones medioambientales siguen obstaculizando la crecimiento de la industria local.
Producción sostenible fuera de China
Producir tierras raras fuera de China es como intentar nadar contra corriente. Las regulaciones ambientales son estrictas, los costos son altos y las tecnologías aún necesitan avances para que el proceso sea viable. Aun así, países como Australia y Estados Unidos apuestan por esta recuperación.
Además de las cuestiones medioambientales, está la barrera del tiempo. La construcción de nuevas refinerías y minas no es algo que se pueda hacer de la noche a la mañana. Mientras tanto, China sigue siendo el líder absoluto y utiliza su posición para negociar a su favor.
El futuro de la guerra comercial y el papel de las tierras raras
Si Estados Unidos y sus aliados pueden diversificar sus fuentes de tierras raras, el equilibrio de poder podría cambiar. Sin embargo, si continúa la dependencia de China, el país asiático tendrá una valiosa carta que utilizar en futuras negociaciones.
La solución puede estar en la innovación. Desarrollar sustitutos para las tierras raras o reciclar materiales ya usados son caminos prometedores. La colaboración internacional será esencial para reducir la influencia de China en el sector.
Las tierras raras son el petróleo del siglo XXI. Controlarlos significa tener poder, y China lo ha entendido durante décadas. Para Estados Unidos y otros países, el desafío es encontrar maneras reducir esta dependencia y al mismo tiempo equilibrar la balanza comercial mundial. En última instancia, la lección aquí es clara: diversificar es sobrevivir.
Intente educar adecuadamente a los lectores.
Estados Unidos restringe las ventas de semiconductores de todo el mundo a China.
Los semiconductores se fabrican en parte a partir de tierras raras, donde el 90% del mercado (tecnología) está dominado por China.
Así, Estados Unidos mantiene sus semiconductores
Y China conserva sus tierras raras.
He faida, faida… Me encanta esta canción.