Copel y la usina de Itaipú están promoviendo la sustentabilidad al generar energía a partir del biogás de Granja Colombari, que formará una micro red de abastecimiento. Este es un proyecto pionero en generación distribuida en Paraná y en todo el país.
Un proyecto que genera energía con biogás desde hace más de 15 años en el oeste de Paraná acaba de dar otro paso fundamental en términos de innovación operativa y tecnológica para la generación de energía descentralizada, conocida como generación distribuida (GD). Mediante un acuerdo entre la Usina de Itaipu y Copel, que entrará en vigor esta semana, Granja Colombari, en São Miguel do Iguaçu, formará una microrred que abastecerá su propiedad y otras unidades vecinas, aumentando la seguridad energética en el Campo.
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Con la implementación de la microrred en Paraná, en caso de falla en el sistema de distribución de energía de Copel, la unidad generadora se aislará automáticamente del sistema y podrá suministrar energía a la zona durante el período de contingencia.
Hace dos semanas, se realizó una prueba de funcionamiento en isla en la región, como resultado de tres años de arduo trabajo, posibilitado a través de un protocolo de intenciones cerrado entre Copel y la usina de Itaipú en Paraná.
El Parque Tecnológico Itaipú y Copel firman convenio de operación, con el objetivo de establecer procedimientos de operación y garantizar la seguridad. Cabe mencionar que CIBiogás también es socia de la iniciativa en Paraná.
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Según Julio Omori, superintendente de Smart Grid y Proyectos Especiales de Copel, este es un proyecto energético que se está manejando con mucho cuidado con la usina de Itaipu, ya que es una oportunidad de aprovechar la generación distribuida, especialmente en las zonas rurales.
Julio afirmó que este es solo el comienzo de un sistema que podrá operar en varios niveles de potencia, con varias fuentes de generación de energía, además del Biogás, y expandirse en toda el área de concesión de Copel e incluso en todo Brasil.
Según el general Luiz Felipe Carbonell, director de Coordinación de Itaipu, la central buscó cumplir sus misiones estratégicas a través del proyecto en Paraná, que son: la preservación de los recursos hídricos de la región, que se utilizan para la generación de energía, mayor uso de renovables fuentes de energía, como el biogás, con miras a reducir la contaminación ambiental.
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El proyecto en Paraná reutiliza los desechos porcinos de la propiedad. Las heces y la orina de los cerdos van a un tanque, donde se someten a un tratamiento durante aproximadamente un mes para que dejen de ser contaminantes, reduciendo la emisión del 90% de los gases que contribuyen al efecto invernadero.
Al final del proceso se generan dos productos, biogás, destinado a generar energía y biofertilizante, utilizado como abono para la siembra. El hato de la propiedad tiene aproximadamente 5 cerdos y 350 bovinos, donde los desechos tienen capacidad para alimentar una mini planta con una potencia instalada de 75 kW.
