De 2011 a 2019, se invirtieron más de R$ 88 mil millones, de los cuales R$ 67 mil millones se destinaron a la economía del país.
El día que la energía eólica en Brasil alcanzó los 17 GW de potencia instalada, un estudio encargado por la Associação Brasileira de Energia Eólica indica que los impactos socioeconómicos y ambientales de la generación eólica en el país superan los R$ 260 mil millones aplicados a la economía. Según la publicación presentada en el XI Brasil Windpower, evento organizado por Grupo Canal Energía-Informa Markets, GWEC y ABEEólica, hay tres efectos de inversiones, directo, indirecto y beneficio.
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Más de 88 mil millones invertidos en energía eólica brasileña
El estudio indica que, entre 2011 y 2019, se invirtieron poco más de R$ 88 mil millones, o US$ 31,3 mil millones, considerando el precio comercial promedio anual del dólar para la venta. De esos valores, el 80% se destinó a aerogeneradores, máquinas y equipos, además de mantenimientos y reparaciones, y el 20% restante a la construcción, de los cuales R$ 67 mil millones fueron invertidos internamente y los restantes R$ 21,1 mil millones para importar productos
Esas inversiones tenían potencial para expandir la producción en las regiones Nordeste y Sur del país (valor agregado) en el orden de R$ 262 mil millones, generando más de 498 mil empleos por año, en promedio, y R$ 45,2 mil millones en salarios. Además, se recaudaron R$ 22,4 mil millones en impuestos de economías relacionadas, de los cuales R$ 11,8 mil millones en ICMS y R$ 1,9 mil millones en IPI.
La energía eólica hace una contribución significativa a la economía brasileña
Un destaque del estudio es que, por su característica complementaria a otras actividades económicas, la fuente eólica contribuye con un aumento significativo en los ingresos de las regiones productoras. Y dice que, dado el valor de la electricidad, este ingreso complementario se convierte en la principal fuente de ingresos para las áreas dedicadas a su producción.
“Eso se debe a que la mayoría de los parques eólicos utilizan el modelo de arrendar pequeñas propiedades y no comprarlas, lo que les permite generar ingresos para los pequeños productores, generalmente pequeños productores rurales y agricultores de subsistencia. Sumado a esto, el importante impacto positivo en las comunidades se debe, entre otras razones, al dinamismo de la economía local”, informó GO Associados, responsable del estudio.
En 2018, GO estima, solo con el arrendamiento de áreas, un total calculado de R$ 169,7 millones. Este valor hace referencia al volumen de 14,71 GW de energía eólica instalados al cierre de ese año. Este monto considera el monto promedio mensual pagado por un aerogenerador alquilado (preoperación y operación) y el número de familias que recibieron estos montos durante los 12 meses.
